El Gobierno les envió un nuevo guiño a los bonistas. Anunció esta noche que iniciará el proceso de compra al Banco Central de los dólares necesarios para garantizarles a los acreedores el pago de los vencimientos de capital de enero. Así, busca potenciar la suba de los bonos soberanos y la baja del riesgo país.
La información fue difundida por el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, a través de su cuenta en la red social X. Allí, precisó que el Tesoro avanzará en “el proceso de compra al BCRA de u$s2.701 millones para hacer frente al pago en dólares y euros correspondientes a la amortización de capital de los bonos Globales y Bonares con vencimiento en enero de 2025″.
Deuda: detalles de la operación anunciada
Quirno señaló que la compra de las divisas se realizará con “parte de los pesos del Tesoro depositados en el BCRA, correspondientes al financiamiento neto alcanzado a Septiembre de 2024, que al 27 de octubre ascendían a $13,26 billones”.
Además, el funcionario agregó: “Esta transacción asegura el pago de capital e intereses de enero de 2025 y contraerá la cantidad de pesos por $2,67 billones“. La contracara será un impacto en las reservas netas, que siguen en terreno negativo.
Guiño a los bonistas
Lo cierto es que el mensaje del Gobierno es un nuevo guiño a los bonistas. Ya había realizado uno, cuando anunció y luego concretó el envío a Nueva York de los dólares con los que pagará en esa misma fecha el cupón de intereses correspondiente a la deuda reestructurada en 2020.
Ahora, a más de dos meses, completará las garantías al comprar las divisas para cumplir con la amortización de capital de los títulos que expiran en enero próximo. Así, los funcionarios decidieron no esperar al anuncio de un crédito de tipo repo con bancos internacionales como el que negocia desde hace ya varias semanas. En total, los vencimientos de enero próximo se acercan a los u$s4.800 millones.
El anuncio refuerza el mensaje oficial: la prioridad es hacerse primero de los pesos (vía ajuste y superávit primario) y luego de los dólares (incluso con reservas netas negativas) para cumplir a rajatabla con el pago de la deuda.
De esta manera, el Gobierno busca retroalimentar la tendencia alcista de los bonos en dólares y, por ende, la baja del riesgo país (que este martes cerró a 933 puntos básicos) con el objetivo de en el mediano plazo volver a acceder a los mercados internacionales. Si bien Luis Caputo asegura que no planea hacerlo en el corto plazo, está claro que bajar la prima de riesgo es uno de los objetivos de cara a los muy abultados vencimientos de deuda externa de los próximos años.