El anuncio del ministro de Economía, Luis Caputo, de la decisión del Gobierno de cerrar el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA), un organismo creado en 1995 para administrar las obras públicas vinculadas a la infraestructura hídrica y sanitaria en todo el país, generó preocupación en varias provincias. Esto se debe a que parte de las obras públicas paralizadas desde la asunción del presidente Javier Milei estaban a cargo de ese organismo y se esperaba su reanudación. “Sinceramente la incertidumbre es muy grande, no sabemos qué va a pasar”, sostuvo el ministro de Obras y Servicios Públicos de La Pampa, Alfredo Intronati.
La aclaración posterior de Caputo sobre que los proyectos que estaban en proceso serán derivados a la órbita de la Subsecretaría de Recursos Hídricos tampoco sirvió para llevar tranquilidad, pues la concreción de las obras está supeditada a que la Nación garantice los fondos y la constante en estos últimos meses desde la Casa Rosada fue retacear partidas, pese a los convenios que firmó con gobiernos provinciales. Desde algunos distritos se admitió que los acuerdos se incumplen.
“Un daño grandísimo”
“El Gobierno está haciendo un daño grandísimo y en La Pampa afecta a las construcción de cloacas en los municipios de Winifreda, Eduardo Castex, Alta Italia y otros proyectos en General Pico que se realizan ahora con financiamiento provincial, aunque por contrato debería invertir la Nación”, sostuvo Intronati. “El daño en la obra pública en este poco tiempo del presidente Javier Milei es irreversible porque ahoga a las provincias pero también afecta la calidad de vida de la gente”, agregó el funcionario pampeano.
Desde Chubut, el presidente del Instituto Provincial del Agua (IPA), Esteban Parra, se mostró manifestó sorprendido por la decisión sobre el ENOHSA. “Siempre fue una herramienta fundamental para el financiamiento de obras de agua potable y saneamiento, así que definitivamente no es una buena noticia”, sostuvo. Detalló que en las últimas dos décadas, numerosas obras fueron financiadas desde este ente: “Prácticamente el 90% de los grandes proyectos de abastecimiento de agua y tratamiento de efluentes en la provincia fueron financiados a través del ENOHSA”.
Parra puso en relieve que el organismo fue clave para acceder al financiamiento internacional de obras de gran envergadura y que fue posible por su excelencia técnica. “Siempre hubo un control técnico porque era el primer paso para acreditar a los fondos para trabajos grandes”, señaló. Entre ellos, señalando al Acueducto de Puerto Madryn que “está pendiente todavía el tramo desde la toma del río hasta la planta potabilizadora y es una obra muy necesaria”. “Ahora no se sabe qué pasará”, cerró.
“Es otro golpe duro para los municipios”
“El cierre del ENOHSA es otro golpe duro para los municipios. En nuestra ciudad nos permitió hacer obras muy costosas de agua, saneamiento y llevamos adelante el proyecto técnico del acueducto para llevar agua a Kaleuche, un trabajo que se paralizó en diciembre pasado”, expresó en una entrevista el intendente de San Martín de los Andes, Carlos Saloniti.
El jefe provincial del turístico municipio neuquino insistió en que la disolución del organismo afectará de manera directa a las pequeñas administraciones debido al servicio que prestaba en asistencia técnica, financiera y para “promover la investigación y el desarrollo tecnológico del sector hídrico y sanitario”. Subrayó que desde el organismo, “también se controla la calidad del agua potable y el servicio de saneamiento”.
Nuevas demoras
Desde Río Negro, el superintendente del Departamento Provincial de Aguas (DPA), Pedro Sánchez, advirtió sobre las consecuencias de la paralización de proyectos importantes que están a cargo del ENOHSA. “Había pocos sitios con obras activas, principalmente las que tienen financiamiento internacional”, dijo. Explicó en contacto con la prensa que la decisión del Gobierno podría afectar obras de agua potable previstas para Viedma y Catriel. En el caso de la primera ciudad, el proyecto alcanzó el 10% de avance hasta diciembre del año pasado y su continuidad quedó en suspenso debido a la imposibilidad financiera de la provincia para costearla, explicó.
En esta provincia son dos las obras que tienen financiamiento internacional, a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID): el Plan Director de Cloacas de General Roca, que está al 29% y activo desde julio y la Planta de Cloacas de Catriel, que se encuentra al 25% y activa. Tanto desde la DPA como el propio ministro de Obras Públicas, Alejandro Echarren, señalaron que el cierre del ENOHSA implicaría la transferencia de estos proyectos a otro organismo, que sería la Subsecretaría de Recursos Hídricos, pero eso generará nuevas demoras.
“Un paso más a la destrucción”
Fernando de Vido, extitular del ENOHSA y actual presidente del directorio de la empresa distribuidora de energía de Formosa (REFSA), consideró que la decisión es “un paso más a la destrucción de un organismo que forma parte del Estado, que es quien da el marco normativo y fija las políticas nacionales de algo tan importante como las de agua potable y saneamiento”. Recordó que en su provincia, la capital tenía en 2003 un 22% con servicio de saneamiento y sin mayores posibilidades de expansión pero el porcentaje creció al 70% hasta diciembre del año pasado y se extendió hasta distintos barrios.
“El ente era el organismo rector que permitía que pequeñas cooperativas, municipios y provincias puedan acceder a distintas fuentes de financiamiento y de créditos internacionales que tomaban las provincias o los municipios. Está clara la intención de seguir destruyendo valores comunes, como lo es un organismo que marcaba políticas para todos los servicios de agua y saneamiento del país”, remarcó. Puso el acento en que la decisión oficial perjudicará, sobre todo, a los sectores más vulnerables, recordando que en Argentina no tienen acceso al agua potable más de nueve millones de personas.
“Se apagan las esperanzas”
Consultado el legislador provincial tucumano Gerónimo Vargas Aignasse, exjefe regional del ENOHSA, sobre la decisión de ponerle fin al ente, señaló que es “la visión de un Estado ausente y es un error porque se necesita un Estado presente y eficiente que no gaste de más y que podamos controlar para dar oportunidades”. “Tendrá un impacto negativo para el interior del país porque aprobó los proyectos de redes de agua y cloacas, plantas de tratamiento y plantas depuradoras en todo el interior del país. Si no llega el Estado, no va a llegar nadie. El ENOHSA tiene 61 años, se apagan las esperanzas de muchos pueblos del interior”, sentenció.